Crítica de “Aladdin”
¡Llegó la lámpara del genio!
Aladdin (Mena Massoud) es un adorable pero desafortunado ladronzuelo enamorado de la hija del Sultán, la princesa Jasmine (Naomi Scott). Para intentar conquistarla, acepta el desafío de Jafar (Marwan Kenzari), que consiste en entrar a una cueva en mitad del desierto para dar con una lámpara mágica que le concederá todos sus deseos. Allí es donde Aladdín conocerá al Genio (Will Smith), dando inicio a una aventura como nunca antes había imaginado.
Película ´muy entretenida, divertida, romántica y entrañable.
Dirigida por Guy Ritchie, ha conseguido realizar una buena adaptación del clásico de Disney “Aladin” y captar toda la esencia de la historia del ladrón y el genio de la lámpara.
Buena actuación de Mena Massoud (Aladdín), Naoimi Scott (Jasmine) actriz guapísima y sensual, aceptable actuación de Marwan Kenzari (Jafar) aunque consigue dar ese toque malvado al personaje, y muy buena actuación del polifacético Will Smith (Genio).
Dura dos horas, pero no se hace larga, es más ni te enteras que pasa el tiempo mientras la ves.
Buena banda sonora, como caracteriza a Disney como ya paso en su día con La Bella y La Bestia.
Tipografía muy chula, esto es el tipo de letra que se usa para poner el título de la película y los actores de la misma mientras empieza.
En la cueva Aladdin salva a una alfombra mágica que estaba atrapada, y esta le sigue durante toda la película.
Curioso baile el que realiza Aladdin, ante la princesa Jasmine.
La canción Un Mundo Ideal preciosa, y pone la carne de gallina al oírla, sucede mientras Aladdin pasea por los aires de la ciudad en la alfombra mágica al lado de Jasmine