Crítica de “Todo pasa en Tel Aviv”
Una gran comedia bien conducida y con un guión brillante
Normalmente en mis críticas no hablo en absoluto de la historia que nos cuentan en la película pero en esta ocasión toca hacer una pequeña nota al respecto y es la siguiente: una película basada en un conflicto militar normalmente tiene escenas de violencia, pero en este caso una de las grandes cosas que nos ofrece es justamente alejar esa violencia por completo de la película, aunque si que es cierto que tenemos varios momentos de tensión pero que no muestran una violencia que pueda romper toda la atmósfera cómica creada.
Salam, un buscavidas palestino de 30 años que vive en Jerusalén, trabaja en el set de la famosa telenovela palestina Arde Tel Aviv, producida en Ramallah. Todos los días, para llegar a los estudios de televisión, Salam debe pasar por un estricto control israelí. Allí trabaja Assi, el comandante a cargo del puesto, cuya esposa es fan de la telenovela. Para impresionarla, Assi se involucra en la escritura del guión. Salam se da cuenta de que las ideas de Assi podrían ser lo mejor que le ha pasado nunca.
En esta ocasión tenemos una película que parte como muchas comedias de una idea muy sencilla y sigue siendo sencilla durante todo su desarrollo, pero gracias al estupendo guión creado por Dan Kleinman y el mismo director Sameh Zoabi, tenemos un desarrollo estupendo ya que tenemos la historia principal y una segunda historia paralela que en determinados momentos eclipsa la principal.
El director, Sameh Zoabi, ha logrado un ritmo increíble para esta cinta y aunque puede parecer que en muchas escenas hay excesos el resultado es brillante y logra que el exceso sea positivo y no negativo como debería de ser en cualquier otra película. Las conversaciones en muchos momentos son geniales y tiene algunos diálogos completamente desternillantes.
Lo mejor viene en el aspecto de la fotografía ya que el trabajo elaborado por Laurent Brunet es sencillamente impresionante ya que no hay encuadre durante toda la cinta que no ayude a mantener el ritmo y narración de la historia. Es parte indispensable a la hora de mantener la narrativa ya que nos ofrece detalles imprescindibles para esta labor.
A nivel interpretativo sorprende mucho ver la facilidad con la que cada uno de los actores nos hace creerles en cada una de las escenas, pero especialmente Kais Nashif es el actor con el que más se disfruta al ver como va creciendo su interpretación al ritmo que va creciendo su personaje y luego tenemos a Yaniv Biton quien desde el principio nos muestra todo el potencial de su personaje y lleva gran parte de esa dureza necesaria en una película en tiempos de guerra, pero que en ningún momento sobrepasa el límite para no incurrir en alguna escena violenta.
“Todo pasa en Tel Aviv” es esa película que es una maravilla y que posiblemente pase sin pena ni gloria por los cines o incluso que no se llegue a estrenar en muchas ciudades y es un error porque merece tanto la pena que se tiene que convertir en una película indispensable.
Como se puede observar es una ampliación de la #CriticasEn30Seg publicada en el Instagram de Críticas en 30 Seg y que os pongo a continuación: